Biblioteca Pública Comfenalco Castilla

Image

Hamilton Suárez Betancur

Vecino Biblioteca Pública Comfenalco Castilla
Image
Image

Es historiador, con una maestría en Urbanismo y está concentrado ahora en su doctorado en Estudios Urbanos y Territoriales. Sin embargo, el conocimiento de Hamilton sobre el barrio no proviene solo de lo académico, surge de recorrerlo, de degustarlo con los sentidos, de dejarse cautivar por los detalles que llaman su atención.

Vive en Pedregal, pero en sus caminatas habita lo que él llama el “Barrio Noroccidental de Medellín”. La reivindicación que hace, aclara, es que “uno puede concebir toda esta ladera, de Castilla al Doce de Octubre, como un gran barrio: el Barrio Noroccidental de Medellín. Hay muchos vasos comunicantes. Concebir puentes para poder entender un gran barrio” y así trascender las líneas que marcan los mapas.

Con solo abrir la puerta o la ventana encuentra su laboratorio, su fuente de información, la cotidianidad que le permite reconocer la vida en una esquina, en el nombre de un negocio, en una Virgen, en unos zapatos colgados en los cables, en una fiesta comunitaria, en un sancocho, en un vecino que hace bulla, en un perro que corre.

Hamilton es pausado y su voz tiene esa capacidad de transmitir calidez y claridad. Trabajó dos años en el Sistema de Bibliotecas Públicas, específicamente, en el Parque Biblioteca Gabriel García Márquez, de ahí asegura, surge su amor entrañable por las bibliotecas, que se extiende, obviamente, a su vecina la Biblioteca Pública Comfenalco Castilla.

Camina el barrio no solo porque lo disfrute sino debido a que en esta acción se fundamenta su metodología de reconocimiento del territorio. “Caminar es un factor biológico que nos es común a la mayoría de los seres humanos, es una acción que aprendemos como hablar, comer y que podemos cultivar. Llama a lo filosófico: caminar como motor de reflexión, quien camina se relaja, maquina de manera más potente sus ideas”.

Por estos días fotografía y georreferencia las expresiones de la religiosidad popular, comenzando en Pedregal. En otro tiempo, tomó fotos a los zapatos colgados en los cables, que le parece que es lo que más representa el paisaje barrial; las materialidades de las casas: el adobe por ejemplo, y las formas cartográficas de los mapas: el caso de las manzanas y sus estructuras. Cree en la riqueza del barrio, en todo lo que ofrece, por eso seguirá transitándolo y motivando a otros a recorrerlo.

Les dice a sus estudiantes de la Universidad de Antioquia “que no hay otra forma de reconocer el territorio que exponer el cuerpo, uno siente la temperatura, la materialidad, a qué suena, a qué huele; entabla conversaciones e incorpora el barrio a través de los sentidos y eso solo se puede lograr caminando. Se come el barrio en una empanada o en un buñuelo. Caminar para mí es fundamental, es una metáfora de la vida”.

Image